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jueves, 10 de noviembre de 2016

La Escobilla del Váter.

Quería compartir una reflexión con todos vosotros. En estos tiempos de precariedad laboral. En los que todos nos quejamos de la falta de trabajos y de la poca calidad de los que hay. Quería hablaros de un trabajo chungo donde los halla. 




El trabajo de Escobilla del Váter. Es que no hay por donde cogerlo (el trabajo, no a la escobilla). Su puesto de trabajo es de lo más insalubre y del cometido mejor no hablemos. Además, es un trabajo con disponibilidad las 24 horas, siete días a la semana, incluyendo festivos claro está, y qué festivos, como alguno de los residentes sea aficionado a las salidas nocturnas. 

Y para más inri, el sueldo. No encontraréis ningún artículo para el hogar, que con tan bajo coste, nos de un resultado más duradero, ¿a alguien se le ha roto una escobilla del váter? En caso de guerra nuclear, solo quedarían las cucarachas y las escobillas del váter.

Por todo ello y sin querer enrollarme más, acabo de desayunar que el váter me reclama. Me despido, pidiendo unos segundos de merecido agradecimiento, para, NUESTRA ESCOBILLA DEL VÁTER.

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